Cuando te adentras en el mundo de los alquileres comerciales, es fundamental entender las particularidades del contrato de arrendamiento comercial. Este acuerdo está regulado de manera especial en el Código de Comercio y ofrece protección tanto a los comerciantes como a los propietarios.
A continuación, te presentamos las claves para comprender este importante documento.
Características del Contrato de Arrendamiento Comercial
A pesar de que este contrato se rige por las normas del Código Civil, el Código de Comercio incorpora disposiciones específicas para proteger las inversiones comerciales. Algunos elementos esenciales que debe incluir son el canon de arrendamiento, la duración, las reparaciones locativas, los servicios y, en ciertos casos, el seguro de arrendamiento. Para asegurar un cumplimiento exitoso, es fundamental tener en cuenta estos aspectos clave:
Regulación del Contrato Comercial
Las disposiciones que regulan el contrato comercial se encuentran en el Código de Comercio. Aquí encontrarás normativas que abordan el alquiler de locales destinados a actividades comerciales y aspectos como los derechos del arrendatario, las obligaciones del propietario, la prórroga o renovación, el subarriendo y la cesión del contrato, entre otros.
Duración del Contrato de Arrendamiento Comercial
El período de vigencia del contrato no está estipulado en el Código Civil ni en el Código de Comercio, lo que brinda flexibilidad a las partes involucradas. Tanto el alquiler de locales como el de oficinas y bodegas de almacenamiento pueden acordarse por meses o años, según las necesidades específicas.
Prórroga o Renovación del Contrato
El Código de Comercio establece el derecho de los arrendatarios a renovar el contrato sobre el inmueble. Esto se puede acordar entre ambas partes. Después de dos años de ocupación, el arrendatario tiene el derecho a renovar, salvo en circunstancias excepcionales como el incumplimiento, la reconstrucción o la necesidad del propietario de utilizar el inmueble para fines personales.
Obligaciones del Arrendador y del Arrendatario
El contrato de arrendamiento comercial impone obligaciones tanto al arrendador como al arrendatario, establecidas en el Código Civil. El arrendador debe:
- Entregar el inmueble al arrendatario.
- Mantener el inmueble en condiciones adecuadas.
- Evitar cualquier interferencia en el uso del inmueble.
El arrendatario, por su parte, debe cumplir con las siguientes obligaciones:
- Pagar el canon de arrendamiento según lo acordado.
- Utilizar el inmueble para su fin comercial específico.
- Mantener el local en buen estado.
- Realizar reparaciones locativas necesarias.
- Entregar el inmueble en las mismas condiciones en que fue recibido al finalizar el contrato.
Subarriendo y Cesión del Contrato de Arrendamiento Comercial
El subarriendo de inmuebles sólo es posible si el arrendador lo autoriza. En ausencia de autorización, el arrendatario no puede subarrendar. Cuando hay permiso, el subarrendatario debe utilizar los inmuebles de acuerdo con los términos del contrato original y, en general, no se le permite darles un uso diferente. Además, el arrendatario puede subarrendar hasta la mitad de los inmuebles. La cesión del contrato sólo es válida con la autorización del arrendador.
En resumen, el contrato de arrendamiento comercial es esencial para establecer claramente los términos y condiciones del acuerdo. Este debe abordar las obligaciones de ambas partes, el derecho de renovación, la duración, el canon de arrendamiento y otros detalles importantes. Estos términos formales garantizan que el contrato se cumpla adecuadamente. En caso de posibles incumplimientos, contar con un seguro de arrendamiento puede brindar respaldo al propietario.
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